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SANTO DOMINGO. De los experimentados dramaturgos con que cuenta el país, el profesor Haffe Serulle es uno de los que se mantienen a la vanguardia con sus aportes creativos al teatro.
De las manos de noveles talentos ha llevado al escenario revolucionarias propuestas que han contribuido notablemente a la dramaturgia nacional.
“Los signos de la carne” es su nuevo reto, cuyo estreno mundial está pautado para el 16 de este mes en la sala Aída Bonelly de Díaz del Teatro Nacional.
“Una historia que ahonda en el complejo de Electra, que consiste en una atracción afectiva de una niña hacia su figura paterna. Este trabajo nos sumerge en una dimensión surrealista donde la fuerte presencia actoral se conjuga con el movimiento de sus cuerpos mediante el método acrobático recurrente”, comentó Serulle al detallar su más reciente creación.
Los roles protagónicos serán responsabilidad de los actores Stuart Ortiz y Yasiris Báez, quienes se formaron profesionalmente en la Escuela Nacional de Arte Dramático.
“Nosotros nos hemos propuesto tocar un tema muy delicado que es el de la violación intrafamiliar. Abordamos el caso de una hija que ha visto en un sueño que su padre la ha violado. Durante esta propuesta teatral el público tendrá que deducir si se trata de un sueño o si en efecto la violó. El público deberá sacar su propia conclusión. Con este trabajo seguimos presentando las nuevas formas de hacer teatro, que es nuestro principal reto y satisfacción”, comentó el director Haffe Serulle, quien agradeció el trabajo de Elena Ramírez como productora.
Yasiris Báez y Stuart Ortiz expresaron gratitud a Serulle por convocarlos a protagonizar la pieza teatral. “Cada experiencia con Haffe es única y espero que la gente nos acompañe”, dijo Báez.
Ortiz contó que en este montaje ha experimentado crecimiento. “Se trabaja mucho en una obra como esta. Creo que es una realidad que no solo vivimos nosotros”, dijo Stuart Ortiz.
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