Vista
En menos de tres años, la FIFA gastó 11,7 millones de dólares en vuelos privados, incluyendo lujosos viajes con fines turísticos de un funcionario de alto rango, de acuerdo con un documento legal recién publicado.
Jerome Valcke, en ese entonces el secretario general de la FIFA, fue exhortado en un memo interno de 2013 a hallar “en lo posible alternativas más económicas”, según se detalla en un veredicto del Tribunal de Arbitraje Deportivo (TAS por sus siglas en francés) que explica las razones por las que la apelación del funcionario a la suspensión por 10 años fue denegada.
El uso excesivo de jets privados y los viajes en clase ejecutiva para su hijo fueron factores para que Valcke fuera suspendido de toda actividad relacionada con el fútbol por el comité de ética de la FIFA, después de su despido en 2016.
Su apelación fue rechazada por el máximo tribunal del deporte en julio pasado.
Los documentos también destacan las intervenciones de Valcke para ayudar a que fuera concretado un contrato de la Copa del Mundo de Brasil valuado en 709.000 dólares vinculado a los intereses empresariales de su hijo.
El veredicto del TAS subrayó que Valcke violó las normas de la FIFA en cuatro ocasiones al viajar innecesariamente en jets privados o con más de un acompañante, y sin cubrir el costo extra.
Los vuelos incluyeron un viaje con fines turísticos al Taj Mahal, una reunión con el emir de Catar en Doha, y un viaje privado en julio de 2015 a San Petersburgo, Rusia, en que fue acompañado por su familia y la niñera de sus hijos al sorteo por las eliminatorias mundialistas.
Valcke dijo al tribunal que en el caso del viaje a Rusia siguió el consejo del entonces presidente de la FIFA, Joseph Blatter, de “no viajar en vuelos comerciales para evitar ser arrestado”. Varias semanas después, autoridades estadounidenses y suizas dieron a conocer las extensas investigaciones por corrupción vinculadas a funcionarios de la FIFA.
Esto “evidentemente no es una razón válida para un individuo que obedece las leyes”, concluyó el panel de tres jueces del TAS. La fiscalía suiza anunció procesos penales contra Valcke en 2016 y 2017 por malversación de recursos. Tales procesos siguen en curso.
El funcionario también ayudó a impulsar la carrera empresarial de su hijo, Sebastien Valcke, en un acuerdo para proveer equipo para una zona de aficionados en la playa de Copacabana de Río de Janeiro durante el Mundial de 2014.
El TAS ratificó además una multa por 100.000 francos suizos (104.000 dólares) impuesta por la FIFA.
Comentarios
0 comment