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Santo Domingo.- La ministra de Interior y Policía, Faride Raful, garantizó ayer miércoles que ese organismo no realizará más "incautaciones arbitrarias" de bocinas y se comprometió a ofrecer una pronta respuesta respecto a los espacios de diversión que han sido cerrados por la Policía Nacional, ante el alto volumen con el que operan.
Asimismo, Raful solicitó la cooperación de representantes de la industria de la música para que den inicio a una campaña de concienciación a sus miembros a fin de trabajar en alianza y lograr que se respeten los derechos de la ciudadanía a vivir en paz.
Destacó, en un comunicado de su oficina, que se inspeccionarán las zonas de tolerancia al ruido establecidas a nivel nacional conforme a la Ley sobre prevención, supresión y limitación de ruidos nocivos y molestos que producen contaminación sonora con el interés de verificar si continúan cumpliendo las mismas características establecidas.
Raful emitió estas declaraciones tras sostener una reunión con representantes de los más de 40 afiliados de la Asociación de la Industria de la Música, a quienes detalló las normativas que forman parte de la convivencia ciudadana para que sean aliados de la institución respetando las leyes existentes.
"El problema no es con los que están organizados, el problema no es con las zonas de tolerancia, el problema mío es con las bocinas en los lugares donde no deben estar", aseveró Raful, según la nota de Interior y Policía.
Por su parte, el presidente de la Federación de Comerciantes, Iván García, respaldó las medidas implementadas por la ministra y le solicitó reabrir las zonas de tolerancia al ruido que han sido cerradas en diferentes provincias, las cuales, aseguró, contribuyen al desarrollo comercial y el empleo.
García se comprometió a organizar una reunión entre Raful y los propietarios de colmados, a fin de que estos también sean aliados en la lucha por lograr una mejor convivencia ciudadana.
Sobre el particular, la ministra indicó que se hace necesario regular a los colmadones, ya que la problemática radica no sólo en el alto volumen en sus negocios, sino también en la ocupación de espacios públicos y la venta de bebidas alcohólicas más allá de los horarios establecidos.
En semanas recientes, el Ministerio de Interior y Policía ha ejecutado, junto a la Policía Nacional, la confiscación en centros de diversión de bocinas con capacidad para elevados volúmenes denunciados por la población por el ruido que producen estos equipos.
Además, algunos de estos negocios han sido cerrados debido a que, según las autoridades, han sido reiterativos en violar la leyes antirruidos.
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